Nuestro plato más emblemático, inspirado en la mayor victoria nacional en la Guerra contra la Triple Alianza.
Con este plato de carne, honramos uno de los episodios más duros y difíciles que tuvo que afrontar el General Díaz.
Explosión de sabores que exalta esa línea dorada de la tapa cuadril, con una aromática fusión de ajo en manteca.
Una vieja historia rescatada de la Guerra, nacida en Pirayú, y que nos permite jugar con la imaginación.
¿Quién dice que un chancho (costilla de cerdo en este caso) no puede descansar sobre la cintura del mono?.
Una noble parte del pollo, adobada desde temprano para ganar sabor y cocida suavemente en plancha de hierro.
Con este plato recordamos a un ruso que peleó por este país en la Guerra del Chaco: el Gral. Juan Belaieff.
Es un humilde homenaje al sargento de parcialidad payaguá que salvó al Gral. Díaz de las bravas aguas del Río Paraguay.
El plato honra al dúo cómico pirayuense "Jaguá ha Pirãi". Pero no se preocupen, es una cazuela de pescados, sin perros.
Sabores que nos trasladan a un mediodía de domingo en casa de la abuela y la familia reunida. No hay día más perfecto.
Eduvigis se erige en una casa construida por italianos, este plato honra la memoria de nuestros antepasados.
En el Cerro frente a la ciudad se eleva "Itá Angu'a", una piedra casi cuadrada que se puede usar como mirador.
Tres héroes pirayuenses que coincidentemente se llaman José, son protagonistas que inspiraron este postre.
Una marcha de 60 km., una misión casi suicida, liderada por Gral. Garay y así retomar los pozos de agua en Yrendagüé.
La caipirinha, cambiada a una versión local. Para justificarlo, decimos que la capturamos en el Marquês de Olinda.
Eduvigis Restó-Bar con mucho orgullo abrió sus puertas en 2015 y lo hicimos detrás de un sueño que quizás para algunos, resultaba
algo impensado de realizar, en un lugar como Pirayú.
Seremos sinceros, en un principio
el concepto iba a ser diferente, hasta que nos volcamos a hacer un restaurante fuera de lo común, donde pudimos exaltar y revalorizar
nuestra historia como ciudad, donde pudimos homenajear a nuestro hijo más dilecto –el gran General José Eduvigis Díaz–, donde podemos potenciar nuestras tradiciones
gastronómicas, culturales e históricas.
Hoy, a punto de cumplir 10 años, ya somos un clásico en esta ciudad, un punto de encuentro
ineludible y además, somos una marca que pisa con fuerza en nuestro propio terruño y con un bravo grito como el de nuestros ancestros,
decimos que en Pirayú, ¡sí se puede!.